Una cosa es saber mucho acerca de rutinas de ejercicios, pero para entender el verdadero funcionamiento de nuestro cuerpo es necesario ir más allá. De esta forma responderemos a muchas preguntas como las más comunes: ¿Por qué no bajo de peso? Cuando me hacen esta pregunta respondo enseguida con otra, ¿Cómo te estás alimentando? o ¿Estás descansando lo suficiente?.

Sabemos que lo más importante es la alimentación, luego viene entrenamiento y descanso, pero ahora más que ahondar en estos pilares profundizaremos en el descanso, especialmente en el ritmo circadiano.

Trabajé un par de años en donde estuve expuesta a muchos turnos, desvelos enteros de noche y siestas eternas de día. Mi cuerpo al poco tiempo comenzó a sufrir las consecuencias y ahí fue que conocí el por qué pasaba esto. El ritmo circadiano, para que lo entendamos en palabras simples el que le dice a tu cuerpo «¡Hey es hora de despertar!»o «No puedo más, necesito una cama» es nuestro reloj biológico, aquel que nos permite llevar un ciclo regular que se repite cada 24 horas.

Durante el descanso nocturno nuestro organismo entra en un letargo, conocido popularmente como «brazos de morfeo», nuestra temperatura corporal disminuye, nuestras reacciones también disminuyen y nuestra presión sanguínea, aunque la actividad cerebral siempre está activa.

Podemos «engañar» a nuestro organismo estableciendo escenarios falsos para lograr la anhelada vigilia (que se produce solo de noche) con cortinas oscuras aún con piezas completamente aisladas de ruido, pero de nada servirá, incluso provocará un doble daño obligando a nuestro ritmo circadiano a funcionar frente a estímulos artificiales.

¿Sabías que?

-A las 21:00 hrs aproximadamente nuestro cuerpo comienza a producir melatonina (hormona inductora del sueño) la cual baja su secreción por la mañana para despertarnos.

-Al no dormir comemos más ya que elevamos la grelina (hormona controladora del hambre) y disminuimos la grelina (hormona de saciedad), ya que nuestro cuerpo necesita más energía para mantenerse despierto, más de lo que ya lo hizo durante el día entero. Entonces nuestro nivel de cortisol disminuye en el día (hormona que aumenta la melatonina) y se mantiene activo durante la noche, respondiendo a estímulos de apetito y antojos de alimentos dulces densos en calorías y alimentos altos en carbohidratos.

-Si tienes altos los niveles de cortisol en tu cuerpo durante un largo período de tiempo, lo más probable es que vas a querer comer grasa y alimentos altos en calorías.

Entonces regula tu ritmo circadiano con un buen descanso, es parte esencial de tu vida fitness, no solamente el ejercicio y este menos si la noche anterior te acostaste tarde, no sea boba y no diga «vine a entrenar igual y eso que me acosté a las 4:00 am» eso no es para nada bueno.