Tener una piel sana e hidratada depende sólo de nosotras y los cuidados que mantengamos desde siempre. Mantener una vida sana, hacer ejercicio y comer bien son sólo algunas de las cosas que nos ayudarán a mantener un rostro firme y terso siempre, pero hay algunas cosas que hacemos muchas veces sin darnos cuenta y que tenemos que evitar que los daños lleguen a nuestra cara.

1- TOCARTE LA CARA

Muchas veces este típico tic que tenemos algunas mujeres nos perjudica, ya que las manos en general están en contacto con superficies que podrían estar contaminadas y que obviamente no podemos llevarnos las manos a la cara sin habernos lavado antes. Cuando las manos están sucias y hacer contacto con el rostro podrían aparecer las células muertas que producen acné y puntos negros, y como no queremos eso adiós a las manos sucias en la cara!.

2- EVITAR EL AGUA CALIENTE

Obviamente no te vas a dar una ducha con agua fría y que te duela tu pobre cabecita, sólo evita que esté demasiado caliente y cuando tenga contacto con tu carita es mejor que sea más fría, ya que el agua caliente remueve los aceites naturales que resecan la piel.

Para evitar o aminorar estos efectos, lo mejor que puedes hacer es hidratar tu rostro. Recuerda que tomar al menos 2 litros de agua diario no sólo te ayudará a mantener y mejorar tu cuerpo, sino que también harán maravillas con tu piel y sobre todo tu rostro. Además de esto intenta aplicarte cremas humectantes mañana y noche, ya sabes que las abuelitas eran las mejores amigas de la crema lechuga, y por lo menos la mía, tenía una piel En-vi-di-a-ble!. No esperen más y empiecen ya a cuidar su bella piel!